Eduardo Omar Honey Escandón
Recién se eliminaron del pensum escolar a cualquier nivel las materias de ética, moral, historia, filosofía, ciencias sociales y literatura, surgió la discusión de cómo enseñar ortografía como gramática básica. El tema causó tal revuelo en redes sociales por veinticuatro horas que el Ministro de Educación fue llamado a comparecer ante el legislativo.
—...en realidad no se requiere de muchas palabras. Con cien, quizás doscientas si exagero, y los emojis, un ciudadano tendrá lo necesario para lo que sea —argumentó el Ministro.
—¿Y es necesario eliminar las evaluaciones…? —increpó una diputada de la oposición.
—¿Las qué…? —molestó preguntó el ministro al ser interrumpido.
—Las evaluaciones.
—No la entiendo, ¿qué quiere decir?
—Si eliminan las evaluaciones. Los exámenes de lengua, matemáticas, física además de lo demás que plantea su iniciativa, ¿no estamos preparando una nación de borregos?
—Se eliminan para no discriminar como usted lo hace. Los exámenes establecen una frontera inexistente entre el aprobado y el reprobado lo que contradice nuestra Constitución y el más elemental sentido común. Además, ni un ciudadano es un borrego, ni un borrego puede ser ciudadano. La voz del pueblo es una voz sabia. La experiencia diaria, lo que se ve con los ojos y la relación con la familia educa lo necesario. Así podemos ahorrar miles de millones en infraestructura, nómina y material que se malgastó por décadas. Con el dinero se podrá ayudar a las empresas que no encuentran los socios y son capaces de brindar la capacitación necesaria. ¿Para qué desperdiciar quince años de una vida en educarse si basta entrenarse dos o tres meses?
—Pero…
—Gracias, diputada, no más interrupciones —cortó de tajo el presidente de la cámara—. Señor Ministro, le agradecemos su presencia, asunto aclarado.
La transmisión de la comparecencia por redes sociales tuvo un impacto menor. El tema de moda era el escándalo detrás del divorcio de una cantante de veintiún años debido al abuso constante del productor de medio siglo de edad. Aparentemente, según los youtubers y tiktokeros, era que ambos mentían, pero más la chica que aprovechó su juventud para embaucar a un conocido empresario.
—¿Cuánto durará este tema? —preguntó el ministro al asesor que estaba en el asiento de enfrente dentro la limousine ministerial.
—Si se filtra el expediente poco a poco, unas dos semanas. Estamos trabajando con la mamá para que cuente la verdadera vida que llevaba su retoño al empezar a cantar a los catorce. Está molesta que, cuando la niña cumplió la mayoría de edad, la despidiera como su mánager.
El ministro guardó silencio por unos minutos. Luego miró la pantalla de su tableta. El conteo de palabras distintas que había dicho durante el día las doscientas.
—Tiempo más que suficiente para que el legislativo aprueba la iniciativa y empiecen a trabajar las comisiones —continuó el ministro—. Me preocupa el listado de palabras oficiales que tendremos que crear. Según tú y tu grupo el mínimo era unas ochocientas, que es una cifra espantosa para vender una idea. ¿No pueden determinar que son doscientas?
—Según un par de expertos, Read y Goulden, podrían bastar cincuenta. Por eso las doblamos como el mínimo y le propusimos a usted, señor Ministro, doscientas para que no quedara mal. Si un par de científicos dicen eso, ¿por qué no podemos convertirlo en realidad?
—Entonces ve preparando a tu grupo para que esto se vuelva realidad. Recuerda que si funciona en dos años tendré posicionamiento para ir por la Presidencia, ¿entendido?
—Claro, Señor Ministro.
Bonifacio Contreras Tovar
Gracias a que el partido contaba con la mayoría y que era la misma tolda que el ministro, las propuestas recibieron aprobación ipso facto, además de que, a petición presidencial, se asignó presupuesto suficiente.
La oposición, a ver perdida la causa y sin apoyo magisterial debido a que peleaban las pocas plazas con salario que se otorgarían para el Consejo Dictaminador del Futuro Español, decidió esperar otra oportunidad.
Antes de un año, el material escolar abreviado estuvo listo. Contenía una enorme cantidad de dibujos e ilustraciones que cubrían la lengua, matemáticas y escritura suficiente para formar a cualquier ciudadano. Puesto que al ministro le gustaban los números redondos y similares, fueron cien páginas exactas. Las primeras treinta abarcaban la educación básica, las siguientes en la intermedia y las últimas treinta, para alumnos avanzados. Así, con sólo diez por año escolar, bastaba un cuaderno y dos lápices.
El ministro lanzó la campaña de la novísima alfabetización y, en cuanto estuvo en marcha, renunció para dedicarse a preparar su candidatura. En el ínterin las redes se regocijaron de que la cantante regresara con el productor y juntos estuvieran dispuestos a tener un hijo. “Mi futuro retoño, mi new español” tiktokeó la chica tras llegar a un acuerdo que nunca trascendió.
Sin embargo, un hashtag surgió: #QueSeaEjemplo dirigido al exministro. En redes diversos influencers adolescentes no estaban dispuestos a estudiar el nuevo contenido educativo a menos que el propulsor de la iniciativa y su partido, incluyendo familias, fueran un modelo a seguir.
Ante la derrota del equipo nacional para pasar al mundial, escándalos que duraban menos que un cerillo y dificultades diversas al tener a los niños como jóvenes en casa, la tendencia se volvió viral.
El exministro fue llamado de emergencia al palacio presidencial una madrugada. Entró y salió por una de las puertas de servicio. Hubiera quedado como una nota perdida en un tuit de texto de no ser por un periodista que salía de un bar en las cercanías. Decidió que la ruta era más corta por detrás del palacio y, mientras discutía su mujer por videollamada debido a la hora, se dio de bruces con el anterior servidor público. Los tres segundos que este apareció fueron suficiente para que a la tendencia anterior se sumara el #MinistroFantasma. Su rostro, de espanto y totalmente pálido tras el regaño por parte del Presidente, era evidencia de que corría riesgo ser el sucesor.
—¿Qué debo hacer? —preguntó el exministro al asesor que parecía vivir en la limousine y la casa del político.
—Una conferencia de prensa donde muestre que el nuevo español es el futuro. Debe estar acompañado de su señora esposa y sus dos hijos. Una imagen familiar, de seguridad y armonía, es lo que se necesita en este tiempo, dar la sensación de continuidad sacudirá los corazones. Para votar no se requiere pensar.
—¿Una semana será suficiente para prepararme?
—No lo creo —respondió el consultor tras observar las tendencias—. Dos días a lo sumo o puede considerarse un cadáver para la presidencial.
Se emplearon recursos del partido para avisar que el exministro daría una conferencia de prensa donde lanzaría un importante mensaje. Apareció en televisión, radio, banners en sitios y pop-ups por doquier en internet.
La viralidad de los hashtags previos empezó a bajar ante los bots y personas pagadas que empujaban #PorUnNuevoEspañol, además de #UnFuturoEducado. El consultor y su grupo pasaron veinticuatro horas preparando el discurso al igual que la escenografía en la mansión del exministro. Hizo pruebas de maquillaje, vestuario y postura tanto para la esposa como para los dos infantes, el menor de cinco y la niña de siete años, que se encontraban emocionados al ser centro de tanta atención.
Finalmente llegó el día anunciado e inició la transmisión. El candidato, portando un traje azul con una corbata con los colores del partido, se encontraba sentado en una sala que mostraba buen gusto y austeridad (la verdadera estaba cuidadosamente embalada en un camión detrás de la propiedad). A su lado, su esposa portaba un vestido recatado y que creado por un diseñador de fama. Los niños, fuera de su horario de dormir, sonreían y charlaban entre ellos ante tanta fiesta.
El micrófono direccional se acercó al exministro, cuasicandidato, que con un gesto ensayado soltó la mano de su esposa y empezó a hablar:
—Yo, líder político, ejemplo nuevo español hablar nación. Mostrar buen español, patria hacer. Futuro, yo, nuevo presidente. Educar triunfar. Yo líder.
El asesor y su equipo, para llegar al límite impuesto por la comisión y el exministro habían eliminado, por inútiles, los artículos, pronombres, adjetivos, adverbios y tiempos verbales entre otras finuras. Emocionado, sabía que el mensaje sería directo, contundente y lo lanzaría a la fama mundial cuando demostrara que la imagen pesaba más que la palabra misma. Solamente lamentaba no poder añadir emojis al habla.
La niña, al escuchar a su papá, se desprendió del abrazo de su madre, bajó del sillón y se acercó a las piernas de su papá. Con jolgorio, ante el micrófono abierto, exclamó:
—¡Papá habla como mi hermanito! ¡Cacabebé dice!
El exministro calló de súbito, el asesor se puso transparente y las redes gritaron. Un nuevo hashtag surgió #LordCacabebé acompañados de memes. En cinco segundos era tendencia mundial.
Aunque el exministro intentó minimizar el asunto, no recibió atención. El videomeme de él y su hija se volvió un hito y bandera para una revuelta juvenil contra el orden establecido. De emergencia el presidente empujó una iniciativa que prohibía la presencia de niños en medios masivos bajo el supuesto que era violación de privacidad y defensa de derechos infantiles, otra para proscribir figuras retóricas tanto en el habla como en lo escrito, y una para que sólo fueran textos, no memes, la única forma permitida para expresarse en redes. No hubo manera de frenar la caída del partido gobernante.
La diputada que había interpelado a exministro renunció a su cargo y, bajo el hashtag #NoAlFascismoEducativo, lanzó su candidatura. Triunfó por amplio margen. Eso sí, cuidó de no salir en vivo con sus dos hijas de cinco y siete.
Eduardo Omar Honey Escandón (Ciudad de México, 1969). Ing. en sistemas. Autor de Códex Obsidiana y Cósmicos Espejos. Desde los años 90 ha participado en talleres literarios bajo la guía de diversos escritores. Textos suyos fueron primer lugar (Teresa Magazine 2020, Nyctelios 6ª ed., El Ojo de Uk categoría poesía 2022), segundo lugar (bokker Awards 2021), tercer lugar (Del sabor al gusto 2022) o finalistas. Publica constantemente en plaquettes, revistas físicas, virtuales e internet. Ha sido seleccionado para participar en una veintena de antologías. Imparte talleres de escritura para el Gran Colisionador de Textos Especulativos. Pertenece a la generación 2020-2022 de Soconusco Emergente.