Sarah Williams
Traducción de Gloria Ramos
Alcanza mi Tycho Brahe, cuando al fin lo haya encontrado,
le diré mi última ciencia, humilde, a sus pies postrado;
sabrá las leyes del mundo, mas quizá llegue a ignorar
que buscamos, desde entonces, nuestra labor completar.
Doy mi teoría entera, te pido que lo recuerdes,
sólo unos datos faltantes vendrán cuando los encuentres;
el mundo ha de rechazarla, por original y cierta,
y la infamia de lo nuevo tal vez sobre ti se vierta.
Pero, como mi aprendiz, comprendes el menosprecio;
nos reímos de la lástima y gozamos del desprecio.
Para nosotros no es nada ni la amistad ni su miel,
para nosotros, ya nada los placeres de oropel.
Dile al colegio teutón que su honor llega ya en vano,
pero no hay que condolerse del sino del docto anciano.
Si oscura mi alma anochece, luz será su amanecer,
mucho he amado las estrellas para a la noche temer.
¿Tus ojos, mi niño, lloran? Guárdalos para mirar,
te harán falta, observador, esta noche y muchas más.
Sólo tú me sobrevives, tú que conoces mi plan,
¿no tienes a nadie, dices, y te dejo en soledad?
Besa entonces mi frente; algo ha faltado a mi ser
desde que mi madre dejó su bendición en mi sien.
Puedo apenas comprenderlo: debí mostrar más bondad,
quererte con más esmero ya que he de dejarte atrás.
¿No carecí de bondad? No, reñir nos era inferior,
la frialdad más reservada fue en nuestra vida el error;
mas tu alma es inmaculada, bien te puedo consagrar
a servir a nuestra ciencia. ¿La harás avanzar? ¡Lo harás!
Quiero revisar contigo todavía ciertas cuentas,
saber que tus deducciones serán lógicas y ciertas.
Y recuerda, la paciencia siempre es del sensato lema,
ni este día, ni mañana, vendrá al fin la era perfecta.
Sembré, como Tycho Brahe, lo que otros han de segar,
mas, si mis mieses se pierden, no podré yo descansar.
Así, sé celoso y fiel, aunque, como yo, sin nombre;
cuida que nada te induzca sólo a perseguir renombre.
Mi aprendiz, he de marcharme, ya me es imposible hablar,
Abre la ventana a Venus, mi vista es muy débil ya;
Curioso que, como Marte, rojo luzca el astro perla.
La merced de Dios guiará mi paso entre las estrellas.
Foto de Jaredd Craig, Unsplash
Sarah Williams (Londres 1837 – 1868). Poeta y novelista, en vida publicó relatos cortos y un volumen de poesía bajo el pseudónimo Sadie. Un segundo volumen de poemas y una novela fueron publicados de manera póstuma.
Gloria Ramos [traductora] (Ciudad de México, 1985). Estudió Lengua y Literatura Hispánicas en la FES Acatlán, se especializó en traducción literaria en la Escuela Nacional de Lenguas, Lingüística y Traducción. Forma parte del colectivo de traducción Falsos Amigos.
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